El modelo de intervención en EVD Galicia se sostiene en tres pilares fundamentales: La atención individualizada, La interacción contextual y el Trabajo multidisciplinar
Atención individualizada
Realizamos un trabajo individualizado con cada mujer. Debemos tener en cuenta las características, capacidades y circunstancias específicas de cada una de las mujeres y su relación con el entorno. Cada persona es única, como lo son sus necesidades de apoyo, sus gustos y preferencias.
Interacción contextual
Es fundamental para las personas con discapacidad y grandes necesidades de apoyo contar con un entorno estructurado, estable y predecible que les aporte sensación de control.
Entorno
Accesible, en el que poder desarrollar la autonomía al máximo, versátil y flexible, facilitando la adaptación, el bienestar, la sensación de hogar y la participación de la persona en su contexto, tanto físico como personal.
Ambiente
Ordenado, que ofrezca oportunidades de desarrollo personal y participación, donde las personas puedan ser protagonistas de su vida, tomar decisiones, influir y sentirse importantes.
Necesidades
Las distintas personas que prestan apoyo, detectan necesidades en relación al contexto, transmitiéndolas a su referente con el objetivo de que se tomen las medidas necesarias para adaptar dicho contexto.
Usuaria
Cada mujer encontrará un contexto estable dónde se le proporcionan los apoyos individualizados necesarios para mejorar su calidad de vida. La participación de la persona en las decisiones de su propia vida, es fundamental para poder realizar una intervención integral.
Actitud
La actitud de todos los profesionales debe ser proactiva hacia las necesidades de apoyo de las personas, de modo que se dé una búsqueda constante de adaptación.
Participación
Para garantizar la participación el contexto debe ser accesible, la información relevante y debe ser compartida con ella.
Comunicación
Debe estar adaptada para lograr el feedback, para que cada una pueda expresar sus deseos, tomar sus decisiones…